Resumen: |
Sean mis primeras palabras -deben serlo- de gratitud (1). Cordialmente os agradezco a todos vuestros favorables sugragios. Representáis la tradición literaria española; modestamente he procurado yo servir esa tradición. Entre vosotros, a quienes admiro, a quienes quiero, me encuentro rodeado de amigos. De amigos que sienten los mismos fervores que yo siento. El amor del operario a su profesión es lo que más importa en los oficios, liberales o mecánicos. Cualquiera que sea el trabajo que realicemos, grande o pequeño, lo esencial es realizarlo con vivo amor. |