Nota de contenido: |
Esta es la defensa que hace de sí mismo un personaje fascinante que se encuentra en el umbral de la muerte. Audaz, seductor y culto, Antonio de Morga escribe con pasión sobre los sucesos de su vida en las lejanas Filipinas, en la espléndida México y en la insólita Qito del siglo XVII. Fino observador de las naciones que pueblan las tierras conquistadas por españa, describe con deleite las emociones que encontró su relación con las mujeres, en las obras de los grandes artistas quiteños o en eruditas disputas con teólogos. |