Resumen: |
Sólo dos palabras. Hace cuatro siglos (3 de diciembre 1552) moría, en la Isla de Sanchón, San Francisco Javier, fundador de las misiones modernas de Oriente. Sucumbre a las puertas de China. Parece el misionero derrotado. Soñaba entrar en Cantón evadiendo las leyes chinas que prohibían el ingreso en el celeste imperio a todo extranjero, presentarse al rey, ir a las universidades del inmenso continente, convertir para Jesucristo aquellas vastas re casi al pie de las ciclópeas muralllas, herméticamente cerradas. |